.: 1 de diciembre, Día Mundial del SIDA :.

Dicha celebración, propuesta en la Cumbre Mundial de Ministros de Salud en 1988, se realiza anualmente y con ella se busca informar a la sociedad de las nuevas cifras de esta alamrante enfermedad, además de buscar ayuda de los gobiernos para nuevas campañas de prevención. A continuación, un especial del diaro La Tercera Publicado en su página web.

La campaña tiene por objetivo lograr resultados en favor de la niñez y la juventud, para el año 2010, que se puedan cuantificar a partir de objetivos acordados a nivel internacional en cuatro esferas fundamentales:

A pesar de que todos los días mueren 1.400 niños y niñas menores de 15 años debido a enfermedades relacionadas con el SIDA, de que todos los días más de 6.000 jóvenes de 15 a 24 años contraen el VIH, y de que 15 millones de niños y niñas han quedado huérfanos debido al SIDA, el mundo todavía piensa que el VIH/SIDA es algo que afecta principalmente a los adultos. Los niños, las niñas y los jóvenes están ausentes de la respuesta mundial sobre el SIDA.

Es por eso que UNICEF Y ONUSIDA organizaron una campaña cuyo lema es "Únete por la niñez, Únete con la juventud, Únete para vencer al SIDA", y tiene por objetivo llamar la atención del mundo hacia los problemas que enfrentan los niños y niñas a diario debido a esta epidemia, e intensificar la lucha en contra el VIH/SIDA.

La campaña tiene cuatro objetivos fundamentales:
1. Prevenir la transmisión del VIH de madre a hijo, por medio del incremento de la oferta de servicios de atención prenatal y de salud sexual y reproductiva, hasta alcanzar a todas las mujeres y parejas que lo necesiten.

2. Proporcionar tratamiento pediátrico antirretroviral u otros medicamentos especiales a todos los niños y niñas que lo requieran.

3. Prevenir las nuevas infecciones, reduciendo en 25% el número de jóvenes que viven con el VIH.

4. Proteger y apoyar a los niños y niñas afectados por el SIDA, llegando al menos al 80% de aquellos que necesitan apoyo y servicios.
La epidemia del VIH/SIDA ha sido una de las principales preocupaciones de la comunidad internacional durante más de dos décadas y, sin embargo, la gran mayoría de los jóvenes no saben cómo evitar el VIH/SIDA y no tienen acceso a la información, las aptitudes y los servicios necesarios para protegerse.

Menos de un 10% de las mujeres embarazadas tienen acceso a servicios para evitar la posibilidad de transmitir el VIH a sus hijos e hijas. Menos del 10% de los niños y niñas que han perdido sus progenitores o son vulnerables ante esta enfermedad reciben la ayuda necesaria. Y menos del 5% de niños que necesitan tratamiento contra el VIH/SIDA lo reciben.
Los niños y las niñas no cuentan para los encargados de elaborar políticas a nivel internacional, para los gobiernos nacionales y para los grupos públicos que responden a la pandemia del SIDA. Es preciso alertar al mundo de una realidad muy clara: que el VIH/SIDA está dejando sin infancia a decenas de millones de niños y de niñas. Ellos deben ocupar el lugar principal que les corresponde en la agenda mundial sobre el SIDA.